Seguramente, al final, como (me) pasa con todos los políticos, acabaré decepcionado también, pero mientras tanto «me la paso fenómeno», que diría uno de por ashá del cono sur.
Este Milei, que ahora me ilusiona, es un tipo valiente. Lleva ya unos años en los medios y mantiene cierta cordura en unos planteamientos muy poco correctos para lo que se lleva, por eso me gusta, porque lo fácil está hecho para que lo hagan los facilones, y este caballero no se para en barras, ni mucho menos.
Esto dice de él la (progre) escandalizada wikipedia en sus primeros párrafos:
«Javier Gerardo Milei (Buenos Aires, 22 de octubre de 1970) es un economista, político y docente argentino, líder del espacio político La Libertad Avanza.» Hasta aquí aún no le han podido meter el dedo en el ojo porque solo se habla del nombre, procedencia y profesión. Ahora viene lo «escandaloso»
«Comúnmente es definido por medios de comunicación internacionales como un político de extrema derecha, en tanto que medios nacionales argentinos y consultores políticos de ese país lo describen como de «derecha libertaria». Extrema derecha, salió el bingo rápido. Ser anti los Kirchner y antiprogre te adjudica sin más lo de extrema derecha. Los de dentro, que saben que es muy-mentira, lo reducen a libertario, que en «argentinés», es tres cuartos de lo mismo. Libertario, ¡lo peor!
«Es seguidor de los postulados formulados por los economistas de la escuela austriaca, y se autodenomina como «anarcocapitalista en la teoría», «liberal-libertario» y «minarquista en la vida real», aunque varias de sus posiciones políticas se han considerado como conservadoras.» Lo peor de cada casa: anarco, libertario y por si faltaba algo, además, !conservador¡ !Habrase visto¡
«Varias de sus posturas (sic) han causado polémica:
– su oposición al aborto, incluso en casos de abuso sexual (¡horror, es coherente¡),
– su rechazo a la educación sexual en las escuelas (los padres qué tendrán que ver con todo esto…),
– su apoyo a la libre portación de armas,
– promover la teoría de conspiración de extrema derecha llamada marxismo cultural, (esto tiene dos pelotas, «teoría-de-la-conspiración-de-extrema-derecha-llamada-marxismo-cultural, así todo seguido. Es bestial que en una web donde se supone que describen un pensamiento político puedan poner tantos adjetivos y sustantivos de opinión sesgada, juntos y sin rubor. Si un tipo piensa que la izquierda woke y progre intenta imponer una agenda ideológica a su gusto, de inmediato no son ellos los que tienen un plan concreto, eres tú el malvado teórico de la conspiración (jajajajaj) por decir que eso no te gusta. Manda cojones en el río de la Plata.
Y por último, lo «describen/acusan» de
– la negación de la existencia del calentamiento global (sacrílego, mira que decir que no arde o se congela el mundo cada seis meses…)
– su concepción del Estado como un «enemigo». (Aquí es donde me emociono. Sus mejores insultos son para lo que él llama la casta, los parásitos, los chupasangres, los políticos que roban tu dinero a manos llenas. A ellos dedica sus mejores piropos allá donde le dejan hablar.
La única realidad es que propone el cambio radical. Recuerda permanentemente que hacia el año 1900 Argentina era uno de los países más ricos del mundo y que desde el control del Banco Central y la llegada de los peronistas la cosa ha ido de mal en peor a toda velocidad y que hoy el país da vergüenza. Culpa de todo a la enorme, corrupta y opaca clase política y propone «sacar la podadora», reducir el estado al máximo, dolarizar la economía (arrebatar de las «sucias patas del banco central argentino» el dinero de la gente) y devolver la libertad de acción a las personas y las empresas. Pero no todo es economía. Está en contra del aborto por puro sentido común, eso es una vida ajena a la madre y no se le puede matar, está en contra de la ideología progre porque elimina libertades y regula todo, está en contra de la izquierda porque empobrece todo lo que toca…
Y la verdad es que ha sorprendido a todo el mundo en Argentina. Lo que era un economista-tertuliano, medio gracioso-escandaloso en algunas televisiones se ha ido convirtiendo en un fenómeno de masas, sobre todo entre los jóvenes, como un pop star o un actor de moda. Llena calles, plazas y pabellones en los lugares más insospechados, grita como un poseso intentando cambiar las mentalidades adormecidas, da clases de economía en lugar de mítines y acaba siempre con un grito que ya es de conquista: «Viva la Libertad, carajo!!»
Oirán más de Milei, esperemos que desde la Casa Rosada a no mucho tardar y, ojalá que, como él dice, sea capaz de «sacar la podadora» y usarla hasta aburrirse.
Hay miles de vídeos circulando por la red. Entre los muchos que podía poner escojo este, su aparición en el encuentro Viva22 de Vox, donde, tras la excitación inicial, explica con mucha claridad su «batalla cultural» en el ámbito económico entre países libres y países controlados:
https://www.youtube.com/@JavierMileiOK/featured
¡Viva la libertad, carajo! ¡Viva Milei!